Frente al ordenador. 

Así es como nos encontramos a diario los profesionales de medios de comunicación. Tenemos que escribir para locutar, subir a la web o llevar a imprenta aquello que los espectadores o lectores encontrarán en televisión, radio, periódicos e Internet. 

Un proceso que, cada vez, es menos sencillo. Durante ese período de tiempo se reciben llamadas, visitas a la mesa de personas de ‘rango’ superior que tratan intervenir en nuestro trabajo, etc. El periodista quisiera, entonces, encontrarse en una burbuja, mantenerse aislado y no sufrir interferencias que mermen la finalidad y objetivo que se persigue: informar, y bien. 

Aunque encontremos esos factores externos que tratan de interponerse entre el profesional y su ordenador, debemos obviarlos, espantarlos como si de una mosca que no para de molestar se tratase y continuar con nuestro cometido. Volver al origen de este trabajo y reducir todo aquello que disminuya la fuerza del mensaje entre el emisor y el receptor. 

Escribir, leer, volver a escribir, releer y dar por concluido nuestro texto cuando sólo nosotros estemos seguros de ello, con responsabilidad y profesionalidad. De eso sólo sabemos los periodistas.

Almería acogió lo que se denominó coloquialmente ‘cumbre del tomate’, un encuentro celebrado entre los máximos representantes de las consejerías de Agricultura de las comunidades andaluza, murciana, valenciana y canaria. Las cuatro regiones suman el 90% de la producción y cerca del 100% de la exportación nacional del tomate. A través de esta representación de unión aseguraban defender sus intereses frente a un acuerdo entre la Unión Europea y Marruecos que no beneficiaba al sector agrícola español. Suscribieron en el documento -’Defensa del sector español productor y exportador del tomate fresco’ que se dirigió al Gobierno y a la UE- evitar que Europa realice “ulteriores concesiones” respecto al vigente Acuerdo de Asociación con Marruecos. Semanas más tarde, Griñán cesó a Martín Soler como consejero y, ahora, dos años más tarde, el futuro del tomate mantiene el mismo tono oscuro que entonces.